¡Un nuevo cuento!
LA
DRAGONERA SECRETA
Un día de otoño una niña llamada Yaiza
bajó al desván; estaba asustada por que a ella le daba miedo la oscuridad, pero muy decidida cogió una cerilla y encendió su farol.
Vio algo moverse pero no le dio importancia,
oyó algo como: gruuuuuu, gruuuuuu.
Ella se empezó a interesar y dijo:-¿Hay alguien? No os voy a hacer nada solo
quiero saber si aquí hay alguien.
De nuevo sonó: gruuuuuu, gruuuuuu
El que hacia ese ruido dijo: -¿Eres humana?
Yaiza contesto:-Pues claro.
Yo soy el dragón Montón Caramelón, pero me
puedes llamar Caramelo-dijo el dragón. Que nombre más raro.-contesto la niña. Y
el dragón le respondió:
-Viene ¡de que me encantan los caramelos!
La niña le dijo:-Adiós caramelo, me tengo que subir, solo
he bajado a por unas cosas para mi padre que está montando una maqueta de un
coche con mi hermano Luis. No te preocupes mañana volveré.
El dragón acepto y se fue volando.
Papi he visto un dragón en el desván. Se
llamaba Montón Caramelón. - Dijo la niña. El padre y ella se
encerraron en la habitación de la niña y de su hermano y el papá le
dijo:-No te preocupes es Caramelo es amable, simpático
y alegre. Tú eres la más lista de la familia porque has encontrado la dragonera
secreta; ven, ya verás.
Fueron al desván y vieron una puerta que
Yaiza no la había visto nunca y ponía en letras grandes y doradas: DRAGONERA
Yaiza le dijo a su papá:- Papi no podemos pasar está cerrada con
llave.
Su papá sacó una llave plateada que
cabía perfectamente en la cerradura.
En la dragonera había miles y miles de
dragones.
Empujaron los dos a la vez el padre y
Yaiza Uno la llevo volando, otro corriendo y otro llevo andando tranquilamente.
Finalmente se fueron a casa tranquilamente
y volvieron muchas veces más.
Fin
Autora: Alba
Mera Díaz